Juan Miguel Alcántara Soria

Presidente: No cancele el futuro

Por Juan Miguel Alcántara Soria

Vivimos un momento de quiebre entre órbitas gubernamentales, y de agravios a diversos sectores sociales. Legisladores de Morena -y del palero de todos, el “Verde”- aprobaron extinguir 109 fideicomisos y fondos federales solicitada por el presidente López, desoyendo a numerosos afectados. Despreciaron el dato de que recursos que se le entregan son de todos, no del gobierno central, ni solo para Tabasco o su clientela electoral. De ahí la respuesta de 14/32 gobernadores: Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Durango, Colima, Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Michoacán, Yucatán y Quintana Roo. (Vimos palabra “Nortexit” se hizo tendencia en redes entonces).

Rechazan ese agandalle centralista de dinero de todos, que anulará posibilidades de mexicanos, que viola derechos humanos de niños con cáncer, en guarderías y en estancias infantiles, estudiantes en escuelas de tiempo completo; agricultores –el FIRA, muy relevante en Gto-, investigadores y científicos -los del Cinvestav-, de víctimas de violencia, de deportistas, artistas, policías municipales y estatales; al fondo para desastres naturales, entre muchos afectados. Solo para que el presidente disponga de más dinero como se le pegue la gana, sin pedir a nadie autorización, en ese afán de reconcentrar poder político y económico, desandando el camino del federalismo y de contrapesos exigido en la Constitución, y regresando al centralismo autoritario despótico del viejo PRI. A estos agravios sociales se agrega la drástica disminución de dinero para estados y municipios en el presupuesto 2021.

Como en la “dictadura perfecta”, “del presidencialismo imperial”. Por eso exigir replantear el pacto FISCAL federal y convocar a una 4ª Convención Nacional Hacendaria (anteriores: de 1925 -conducida por Alberto Pani y Manuel Gómez Morin-, 1933 y 2004).

A guanajuatenses nos ha despojado AMLO, en sus primeros 2 años, de más de $22 mil 338 millones de pesos (más de $81mil al conjunto), comparado con los dos primeros años del sexenio anterior, denunció gobernador. Siendo el 6º motor económico del país ¡GTO es el que menos recursos federales recibe hoy por persona! Por este abuso esos gobernadores protestaron el último lunes de octubre. Y anunciaron que acudirán con afectados al Poder Judicial a dar batallas jurídicas y políticas obligadas.

El diputado Juan Carlos Romero Hicks insistió entonces en respetar el principio fundamental de la SUBSIDIARIEDAD o “de complementariedad escalonada”, reconocido en nuestra Constitución (municipio libre-Federación): “Tanto municipio como sea posible, y tanto gobierno estatal como sea necesario. Tanto estado como sea posible y tanta federación como sea indispensable”. (También expresamente adoptado en la Unión Europea: “Tanto nación como sea posible, y solo tanta Unión supranacional como sea necesaria”).

El presidente López evidencia diario su actitud de destruir instituciones que con harto esfuerzo nos dimos. Bajo el pretexto de que en el pasado neoliberal “todo fue corrupción”, no hay algo respetable de antes; y menos lo que él considera entorpece su proyecto y “su” moral -que decretó está por encima de la Constitución-. Aunado a su constante explotación de añejos resentimientos y su fomento de odios. Son visibles los crecientes muertos y pobres del país y su indisposición a corregir errores, pero no paga costos aún. Respondió a esos gobernadores que no devolverá un peso más, y los retó a preguntar a su gente si desean permanecer en la Federación –de la que no propusieron salirse- .

Bien dijo el de Jalisco: “Le vamos a preguntar a los ciudadanos si estamos dispuestos a mantener una relación en la cual Jalisco aporta muchísimo a la Federación y lo que recibe son malos tratos, groserías y desdenes”. Con este dilema, perderá el presidente y Morena en la próxima elección, además. Presidente: Abramos ya, con inteligencia y buena voluntad, el impostergable debate sobre el Federalismo hacendario, para no cancelar nuestro futuro.