08 Sep ¿Por qué no se indigna cuando abusaron de mi hija?
México.- Los colectivos de mujeres que han ocupado la sede la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dijeron que no entregarán sus oficinas, hasta que no se presente la renuncia de su titular, Rosario Piedra Ibarra.
Estos colectivos establecieron un ultimátum para que trabajadores de la sede puedan recoger sus archivos, hasta el lunes o serán quemados.
Ante la “nula atención” que han recibido las víctimas por parte de la CNDH, las mujeres dijeron que tomarán las instalaciones como refugios para familiares de víctimas.
“La verdad me estorban, tenemos muchas familias que necesitamos meter a que descansen y nada más nos estorban, por tener las oficinas cerradas por tener sus papeles”, dijo Yesenia Zamudio -madre de Marichuy Jaime Zamudio, quien fue asesinada en 2016.
Yesenia junto con más mujeres encabezaron la toma de las instalaciones de la CNDH y pidieron a Piedra “que tenga tantita dignidad y que mejor se vaya, ya lo que ya se robó, ya que se lo quede, pero ya que se largue”, dijeron.
Zamudio contestó a las declaraciones del Presidente López Obrador acerca de las pintas a la sede y a un cuadro De Francisco I. Madero, respondiéndoles que Madero murió hace muchos años y no cree que alguien le esté llorando como sí se llora a las víctimas de familiares desaparecidos o asesinados.
Del mismo modo, dijo lamentar que haya más indignación por un cuadro que ni siquiera era original, que sobre la muerte de niñas.
“Yo en particular les voy a decir, este cuadro, estas flores, estos labios pintados, se los pintó mi hija. Mi hija era una niña que a los siete años fue abusada sexualmente, entonces quiero decirle a ese Presidente, que cómo se indigna con este cuadro. ¿Por qué no se indigna cuando abusaron de mi hija?”, dijo Zamudio.
La toma de instalaciones comenzó cuando un par de mujeres acudieron a una reunión con la titular de la CNDH y se negaron a salir de la sala de juntas, reclamando justicia por sus casos. Una de ellas, cuya hija fue violada en 2017, se amarró a una silla para evitar ser removida.