Dictadura lobezobradorista

Por Pixel Indeleble

El hoy Presidente de México Andrés Manuel López Obrador buscó por 18 años la silla presidencial, se pensaría que era por amor a México, pero queda claro que solo lo movía el poder y con él convertirse en un dictador.

Paso a paso y con cada acción, el político Morenista ha ido consolidando su idea de convertir la República Mexicana en una “dictadura lopezobradorista”.

Al igual que Hugo Chávez (qepd), López Obrador tiene una fascinación excesiva en difundir su imagen e ideología a través de las mañaneras, donde es el amo y señor, el único vocero del país y donde además es juez y jurado.

Como su palabra es la ley, ha desatado una campaña de agresiones, calumnias y acciones pseudo-legales contra periodistas, empresarios, rectores de universidades y políticos de otros partidos, al mismo tiempo que libera a presuntos culpables si “colaboran” en su concepto de justicia.

Su “4ta. Transformación” busca asegurar que su gobierno sea interminable o que por lo menos se necesite un segundo periodo, cosa que no se descarta con el manoseo de las leyes y la constitución por parte del Presidente.

Debilitar la independencia de poderes de la nación, es la misión diaria de AMLO, quien además tiene mayoría en el legislativo con sus lacayos de MORENA y ahora logró el control del Poder Judicial.
Aplicando la frase “divide y vencerás”, ha polarizado el país con el mensaje de que los conservadores son una amenaza para su gobierno y los responsables de todo lo que les sale mal, lo que ha generado una división en los mexicanos como jamás habíamos visto.
El Presidente se vanagloria de tener fuerza moral y contar con el amor y respaldo del pueblo bueno, y para mantener esa llama encendida reparte dadivas a través de programas de asistencia social.
El país se aproxima a elecciones y López Obrador busca influir en las mismas con la intención de garantizar el apoyo de los legisladores, lo que le garantizaría tener el poder para seguir moviendo el país a su conveniencia.
Las políticas del actual gobierno no solo no han funcionado, además de tener hundido al país en una crisis de inseguridad, salud y economía, no se ve por donde pueda mejorar.
El poder al Presidente lo ha enloquecido, y el futuro se vislumbra negro, triste y sin esperanza.