20 Mar Acusa Scherer complot de Gertz y Sánchez Cordero
Julio Scherer Ibarra, ex Consejero Jurídico de Presidencia, acusó al Fiscal Alejandro Gertz y a la senadora Olga Sánchez Cordero de actuar en su contra para “manchar su nombre”, con la difusión de información sobre sus actividades y de hechos falsos.
En un testimonio publicado por el semanario Proceso, Scherer Ibarra afirma que es un perseguido de la ex Secretaria de Gobernación y del Fiscal, y -señala- ante el hostigamiento que sufre ha decidido decir la verdad.
Atribuye que hay venganzas personales en su contra, surgidas a raíz del ejercicio de Gobierno que han tenido los tres en la Administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
En su escrito, acusa que ambos funcionarios están detrás de la información que lo relaciona con una supuesta extorsión al abogado Juan Collado, preso por acusaciones de lavado de dinero.
“Desde su posición de poder, Sánchez Cordero y Gertz se valieron de la desesperación de Juan Collado para perseguirme e inventaron una falsa extorsión”.
Relata que Sánchez Cordero desde principios del sexenio quedó acotada en sus funciones como Secretaria de Gobernación, por disposición del Presidente.
“La Ministra en retiro no se permitió sobreponerse al desengaño y desde entonces emprendió una investigación sobre mi persona y mis actividades profesionales”, manifiesta Scherer.
Sobre Gertz, afirma que él lo apoyó para que ocupara la Fiscalía General de la República y que al principio del Gobierno creyó en su probidad y capacidad.
Indica que la publicación de un reportaje en Proceso, titulado “La Casa Secreta de Gertz Manero”, generó el enojo del Fiscal, pues lo culpó de haber dado la información para la elaboración del texto.
“El reportaje de Proceso despertó en el fiscal una ira que hasta entonces desconocía y la descargó en mi contra”, describe.
Scherer indica que desde entonces se generaron malentendidos con Gertz, quien también lo culpó de la filtración del borrador sobre reformas al sistema de justicia.
“Entonces explotó el rencor que yo no podía imaginar y del que no ha habido vuelta atrás: vehemente, agregó a su lista de reproches que ‘sólo un favor’ me había pedido y que yo se lo había negado: impedir que su cuñada Laura Morán y la hija de ésta, Alejandra Cuevas Morán, obtuvieran un amparo por la acusación del homicidio de su hermano Federico Gertz Manero, de lo que él las acusa.
“Lo pidió el Fiscal, sí, a sabiendas de que era un acto ilegal. Colérico como es, desencajado el rostro, conforme avanzaba en los reclamos por sus asuntos personales, le temblaban los labios, le temblaban las manos, le temblaba la voz”, detalla.
Vía Reforma.