Ay Dolores

El presidente que se hace pequeño

Cada mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador se hace más pequeño.

Los gritos, las acusaciones sin fundamentos, las descalificaciones y el abuso de poder contra medios, adversarios políticos y ciudadanos, lo van haciendo pequeño.

La defensa a ultranza, sin antes investigar, de quienes han sobajado los derechos de los mexicanos hasta llevarlos a la muerte, lo van haciendo pequeño.

En las urnas el mensaje fue contundente, por ejemplo en la Ciudad de México, donde todavía duele, y mucho, la tragedia del Metro, la Oposición le arrebató seis de las 11 Alcaldías que había ganado en la elección del 2018.

Pese al dispendio de los servidores de la nación, quienes repartieron apoyos y afirmaron que la vacuna contra el Covid-19 era gracias al presidente, la ciudadanía le dio la espalda a Morena. 

Además, de las 100 Alcaldías que han recibido más apoyo del Bienestar en el País, Morena perdió en 45. Los ciudadanos optaron por el candidato de otro partido, pese a los beneficios recibidos.

En Guanajuato, Morena se topó con pared. De 22 Distritos para diputados locales, los panistas ganaron 21, los morenos sólo pudieron convencer en Salamanca. Mientras que de 46 Alcaldías, en 22 ganaron los candidatos albiazules.

¿Cómo es el desempeño del Gobierno azul?, ¿por qué el electorado le dio su confianza al partido en el poder?

La respuesta es sencilla, mientras desde Palacio Nacional se le critica a la ciudadanía, se le reprocha que quiera prepararse, en Guanajuato se le impulsa con proyectos productivos más allá de las fronteras.

El presidente tiene aspiraciones, pero no escrúpulos. 

Los niños con cáncer, los jóvenes con ganas de empoderar a México, los empresarios generadores de empleo, los mexicanos necesitamos un gran presidente, no un presidente pequeño.